Oculto tras palabras, oraciones y párrafos, el alma del autor observaba a través de su persiana de letras al lector absorto y expectante, que concluía el último capítulo de su libro. Eran los minutos finales que compartirían, palabras que terminarían de entrelazar los tejidos de la historia y que los unirían en una conexión delicada que solamente se puede experimentar a través de unas letras en una hoja de papel.
Sintió que, por fin, cerraba sus tapas solemnemente. Saboreó su nostalgia antes de que la oscuridad se hiciese dueña de sus páginas.
Teatro de sombras (Carolina VH)
