Desde la ventana contempla los pétalos que danzan con el viento furioso. Se siente igual que las ramas del árbol: vacío.
Para no ser desastre la condenó al exilio, por miedo a ser huracán la sentenció al olvido, por creerse monstruo la desangró de un tajo. Después de muerta ella dejó de creer en fantasmas, pero se convirtió en uno que reaparecía cada vez que florecían los árboles amarillos de su fascinación. Así que él decidió talarlos todos y dejar solo este frente a su ventana, de ese modo no tendría que compartirla con nadie.
Mi nombre es María del Pilar Jiménez Alzate. He leído los relatos de Monica Giraldo Restrepo. Debo confesar que todos ellos han entrado a traveés de mis sentidos…me hanocupado, atravesado….y al leer en lo q consiste este espacio de hablando con letras, los relatos de esta autora superan las expectativas y retos planteados por este espacio. La riquza imaginativ, la conecci9n sútil o atrevida entre losnpersonajes y situaciones, son completamente seductoras y envolventes. Infinitas gracias a uds por crear este espacio…para descubrir…los tesoros q personas como Monica Giraldo Restrpo llevan dentro.