Te lo han quitado todo. No hay más sudor. No hay más sangre. No hay más lágrimas. A la barriga no le quedan tripas. Las encías no tienen colmillos. La piel no encuentra sus cicatrices. Ya no te queda nada que ofrecer al mundo. Tragas la poca saliva que te queda. Alzas la mirada con cobardía y miedo. Resuena un grito en el interior de la pupila. Deseas no haber sabido nunca. Te han quitado la soledad. Te han quitado la compañía. La fe ya no cree en ti. La torpeza es tu talento. El oxígeno te está matando. El gusto se ha quedado mudo. Las señales te pierden. Las ganas procrastinan. Las sonrisas se inundan de sal. Los recuerdos son colesterol. Las palabras son mentiras. El sabio señala al necio. Los pies destrozan el camino. La indiferencia se preocupa. Los mosquitos donan sangre. Encerrar tinta ya no te libera. Amigo mío, lo que es ya no es lo que era.
Las comparaciones son odiosas (Álvaro)
